sábado, 18 de abril de 2009

Homónimo


Hola
Cuando te esfuerzas, te empeñas abnegadamente en una meta fijada, y das todo para conseguir el objetivo, cuando das de lo que no tienes, empeñas lo que no es tuyo para cumplir con el trabajo, debiera sentirse una alegría interna desbordante capaz de irradiar a todo el círculo mas cercano. Más ahora es exactamente lo contrario: cuando te esforzaste en esa meta y la recompensa es: "no es lo que queríamos, quizás pudiste haber dado más", el sentimiento interno es frustración porque no se encuentra otra palabra para describir que se dio todo y el resultado no es de agrado masivo. Y a veces no es tanto que lo que uno haga tenga que agradar al resto, sino a veces con un: gracias viejo te pasaste bastaba. No es fuerza de recompensar en doblones de oro o acciones de farmacias, sino que a veces una palabra precisa en el momento exacto era necesaria para pagar el esfuerzo hecho anteriormente...
Sin duda que uno cuando las cosas no debe hacerlas buscando la recompensa, pero tampoco ser pusilánimes y desinteresados con la creación de los otros.
No está demás decirle: "viejo gracias, si no hubieras ayudado hubiéremos estado fritos" u otras frases viscerales necesarias en el momento exacto. El fin justifica los medios decía Nicolás Maquiavelo, y a veces es así, suele ser así...

No hay comentarios:

Publicar un comentario