Tanto que se habla que la democracia aquí y la democracia allá y que la igualdad de derecho, y que todos merecemos lo mismo, y que todos somos iguales, y que merecemos las mismas cosas que tienen los otros por que se lavan la boca con la igualdad y la igualdad...
Personalmente la idea más bizarra es entregarle el poder de un gobierno al
demos, al Pueblo y es por el simple hecho de que ninguna cabeza pensará semejante a otra, es completamente ilógico ya que Dios nos hizo a todos distintos con nuestro sello de autenticidad así que nadie podrá tener los ideales del otro. Unos querrán ir fuera del país y otros dentro del país, esto es así, nunca habrá consenso cuando el gobierno es del pueblo...
Es por eso que existe la cabeza del gobierno que para los griegos era el Éforo, o lo que es hoy el Presidente. Una persona que no es electa para ser vocero de los pensamientos del
demos sino que fue electo producto de sus capacidades, ideas e ideales, principios, valores, formación, ética y un sinfín de otras cualidades propias de un líder.
No es un vocero, no es un representante, no es un gremialista ni un sindicalista: es el presidente (sea gobierno, alumnado, etc.) quien da ideas, resuelve problemas y dicta opiniones sobre lo que si y lo que no se debe hacer en tal y tal situación determinada...
Claro está que al establecer los principios de la democracia se priora que el 50 por ciento más 1 de los electores corresponde a la mayoría y esta no puede ser pasada a llevar por los ideales del presidente. Está más que claro que el semblante firme de una idea debe ser analizada también con lo que quiera el
demos y no "arrancarse con los tarros" y tomar una decisión que signifique la debacle tan temida por los líderes que incluso algunos se aferran a él como moscas a la miel para no soltarse... Ese poder que debe ser dosificado para que no se transforme en una obsesión digna de Napoleón o Stalin.
Pero es intransable que la última palabra la tiene el presidente por mucho que la masa se oponga, y cuando se habla de presidente se entiende también el grupo que acompaña la labor de éste, lo que son los ministros. Por eso es que las decisiones son la conveniencia para el
demos y no lo que quiera la mayoría porque para eso se puede poner frente al grupo a cualquier secretaria que cuente los votos y listo; esto no funciona así, no funcionará así mientras no se invente otro sistema como la democracia.
He dicho